Dormir es un placer infinito.
Te tiendes en la cama, notas las sábanas limpias contra tu piel, el calor de la almohada contra la cara, la seguridad que te brinda sin saber por qué.
Cierras los ojos, con calma, relajando tu respiración. Vienen a tu cabeza las imágenes del día, en un orden caótico que curiosamente les da sentido. Piensas en las conversaciones, en los actos, en todo. Y mientas lo vas pensando las penas parecen menos terribles y las alegrías parecen más satisfactorias.
¿Qué necesitas reflexionar sobre algo? Es el mejor momento. Cuando todo está tranquilo, cuando la oscuridad te acaricia y la noche te mece.
Las mejores ideas se me ocurren en la cama, cuando estoy serena, cuando no oigo nada más que mi respiración, cuando las luces furtivas se cuelan por mi ventana dando vida a objetos que no la tienen y creando un ambiente de fantasía.
Me gusta dormirme en medio de una tormenta, cuando mi cama parece el único sitio sereno sobre la tierra. Cuando oigo la lluvia golpear el cristal y yo estoy acurrucada bajo la manta. Cuando veo los relámpagos rasgando el cielo, los truenos rompiendo el silencio de la noche, mi silencio de la noche.
Soy capaz de provocar sueños. Sólo hace falta que me imagine el principio y la película avanza al ritmo del sueño. El final nunca lo controlo, pero eso me gusta, la sorpresa. Da lo mismo si termina bien o mal, es mi película y me encanta.
Me gusta despertarme por la mañana y, sin abrir los ojos, notar la luz. No me gusta dormir con la persiana bajada, necesito que la claridad me dé la bienvenida a un nuevo día. Si es un día de verano será luz clara, sol, calor; si es invierno será un día oscuro, lluvioso, frío. Siempre será un día diferente.
Me gusta dormir, me gusta disfrutar del momento previo a dormir, me gusta despertar y remolonear esos cinco minutos más.
Dormir es un pequeño placer.
Te tiendes en la cama, notas las sábanas limpias contra tu piel, el calor de la almohada contra la cara, la seguridad que te brinda sin saber por qué.
Cierras los ojos, con calma, relajando tu respiración. Vienen a tu cabeza las imágenes del día, en un orden caótico que curiosamente les da sentido. Piensas en las conversaciones, en los actos, en todo. Y mientas lo vas pensando las penas parecen menos terribles y las alegrías parecen más satisfactorias.
¿Qué necesitas reflexionar sobre algo? Es el mejor momento. Cuando todo está tranquilo, cuando la oscuridad te acaricia y la noche te mece.
Las mejores ideas se me ocurren en la cama, cuando estoy serena, cuando no oigo nada más que mi respiración, cuando las luces furtivas se cuelan por mi ventana dando vida a objetos que no la tienen y creando un ambiente de fantasía.
Me gusta dormirme en medio de una tormenta, cuando mi cama parece el único sitio sereno sobre la tierra. Cuando oigo la lluvia golpear el cristal y yo estoy acurrucada bajo la manta. Cuando veo los relámpagos rasgando el cielo, los truenos rompiendo el silencio de la noche, mi silencio de la noche.
Soy capaz de provocar sueños. Sólo hace falta que me imagine el principio y la película avanza al ritmo del sueño. El final nunca lo controlo, pero eso me gusta, la sorpresa. Da lo mismo si termina bien o mal, es mi película y me encanta.
Me gusta despertarme por la mañana y, sin abrir los ojos, notar la luz. No me gusta dormir con la persiana bajada, necesito que la claridad me dé la bienvenida a un nuevo día. Si es un día de verano será luz clara, sol, calor; si es invierno será un día oscuro, lluvioso, frío. Siempre será un día diferente.
Me gusta dormir, me gusta disfrutar del momento previo a dormir, me gusta despertar y remolonear esos cinco minutos más.
Dormir es un pequeño placer.
9 comentarios:
Me gusta dormir como a ti, escuchando la tormenta y yo acurrucada en mi cama y sobre todo también que entre la luz de la noche, odio dormir con las persianas bajadas.
Ojalá durmiese más de lo que lo hago.
Si, yo también!!!!
Pero cambia el planteamiento:
-Acercarse a las 8 de la mañana a tu cómodo ataud, levantar la tapa e incrustarte dentro esperando a que muera el sol de nuevo.
..y de repente, a mediodía se abre la tapa y aparece Van Helsing con una estaca del Ikea!
Muahuahuahua (ahora si, jake???)
Hombre lo mio seria mas bien al revés. Odio dormir, no puedo dormir. Es una de las cosas que me pasarán factura a lo largo de los años pero como diria uno que conozco yo: "eche o que hai".
El único día que dormí hasta tarde fue por prescripción de Batusai. He de decir que su método funciona.
Saludos
Como diría uno que yo me sé "ya dormiré cuando me muera".
A mi me gusta dormir, pero tú eres una vaga!!!!!!
Deja de dormir y ponte a hacer unas galletitas de coco, que están buenísimas (y eso que no me gusta el coco) :P
Besiños :)
Azrrael: Antes había en el Carrefour unos CDs de sonidos de la naturaleza. Uno de ellos era el de la tormenta. Voy a ver si lo consigo :)
Fuz Neviros: Yo también tengo pesadillas de vez en cuando, pero también tienen su chispa, sobre todo cuando despiertas y eres consciente de que era todo mentira.
Y tu briconsejo ya se lo hebía escuchado a más gente, al final voy a tener que probarlo :p
Jake: ¿No duermes porque no puedes o porque no quieres?
goldhands: ¡¡¡Nooooo!!! ¡¡Van Helsing nooo!!
Sele: Apúntate el briconsejo de Fuz Neviros, a ver si mejora así :D
MeiGhiNha: El objetivo de este post era ensalzar esos pequeños detalles que hacen que me guste dormir, pero sí, también soy una vaga, no es algo que oculte. Si fuese perfecta sería mucho más aburrida.
En cuanto a las galletas, te pasaré la receta para que las vayas haciendo tú, ya que tantas ganas tienes de ellas :)
Besos (x6).
Te entiendo perfectamente, a mí también me encanta dormir. En realidad preferiría que me gustase menos, así podría hacer más cosas en un mismo día.
Lo que nunca he podido es el empezar mis sueños. Ojalá pudiese, ya tengo unos cuantos candidatos ;-)
y lo mejor son las sábanas limpias...
y girarse y abrazarse a alguien :)
Lindalawen: Empezar los sueños es muy fácil. Lo único que tienes que hacer es inventarte el principio de una historia. Procura que sea en escenarios conocidos y con protagonistas conocidos, porque si no te va a costar mucho más, la mente harás más esfuerzos y no te vas a dormir.
Una vez que tengas escenario, protagonistas y sueño deja que la cosa avance. Te irás quedando dormida y el sueño evolucionará solito.
Inténtalo y ya me dirás si te ha salido :)
Osiris: Sí, las sábanas limpias mejoran mucho el escenario, es cierto.
Y yo siempre he preferido que me abrazasen a mí :p
Besos (x2).
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